La advertencia
«La Nueva Revelación de Dios provee una advertencia, una bendición y una preparación para las Grandes Olas de cambio y para el encuentro de la humanidad con una Comunidad Mayor de vida inteligente.»[1]
«Si no ves la advertencia, entonces no valorarás la bendición y no verás la necesidad de preparación.»[1]
«Ahora Dios debe advertir a la familia humana del gran peligro que ha creado, de la gran calamidad que ha puesto en marcha. Porque durante este tiempo, la humanidad puede prepararse y puede mitigar las consecuencias de sus acciones.
Si no lo hace, entonces la civilización humana estará en peligro, en todas partes, en todas las naciones. Las economías quebrarán. Millones de personas se quedarán sin trabajo. Millones de personas tendrán que abandonar sus países de origen, que se habrán vuelto estériles e inhabitables.
Es por eso que la Nueva Revelación de Dios para el mundo debe hacer sonar esta alarma, debe dar esta advertencia.»[2]
«Puede que culpes a Dios por esto, pero Dios ha estado advirtiéndote todo el tiempo a través de tu experiencia, a través de tus sueños, a través de tus sensaciones y a través de tus emociones más profundas. Dios ha estado advirtiéndote todo el tiempo, y el mundo ha estado dándote sus señales todo el tiempo.»[1]
Directivas
«Prestad atención, entonces, a esta gran advertencia. Esta advertencia nace del amor de Dios, pero no obstante es una advertencia. Os está advirtiendo en contra de la creciente posibilidad de error. Os está aconsejando que os tornéis al Conocimiento de Dios que vive dentro de vosotros —más allá de vuestra mente pensante y más allá de las ideas, conceptos y creencias que han sido históricamente establecidas dentro de la humanidad.»[3]
Las Grandes Olas de cambio
«Las Grandes Olas de cambio no son solo un evento único, sino una convergencia de muchas fuerzas poderosas. Es su convergencia lo que creará inestabilidad y cambios impredecibles. Creará tantas fuerzas en interacción que será muy difícil para la gente comprender lo que está ocurriendo y porqué todo esto está ocurriendo. Es peligroso, porque ello producirá una inmensa agitación e inestabilidad, y la gente no está preparada para esto. Sus gobiernos no les han preparado. Sus instituciones religiosas no les han preparado. Los medios de comunicación no les han preparado. Y, por tanto, la gente tiene muy poca preparación emocional o psicológica y muy poca preparación práctica para las grandes dificultades que vendrán.
Es también un tiempo peligroso porque la humanidad va a encarar limitaciones en sus recursos, y existirá una gran competición y riesgo de conflicto por el control de los recursos restantes. Naciones y grupos competirán entre sí muy intensamente, y esto puede desembocar en guerras y conflictos a una escala muy grande y en muchas partes del mundo a la vez.»[4]
La Intervención
«También estáis encarando la presencia de fuerzas del universo, seres físicos que están aquí para aprovecharse de una humanidad débil y dividida. Estos pequeños grupos de fuerzas no son de naturaleza militar. Representan exploradores de recursos y Colectivos económicos. Ellos intentarán potenciar el conflicto humano y ganar influencia en las salas de poder de los gobiernos, las religiones y el comercio. Ellos representan un gran peligro para la humanidad.»[4]
Referencias
- ↑ 1,0 1,1 1,2 Un nuevo camino hacia delante para la humanidad: Qué salvará a la humanidad
- ↑ El Nuevo Mundo, Capítulo 3: La emergencia global
- ↑ La profecía del Nuevo Mundo: El destino de las naciones
- ↑ 4,0 4,1 La profecía del Nuevo Mundo: Navegando los tiempos difíciles por delante
Más para estudiar
- El Nuevo Mundo, Capítulo 2: La gran advertencia