Autoimportancia
«La autoimportancia trabaja en contra de la recuperación del Conocimiento, porque continúa reivindicando una idea sobre ti mismo que no es consistente ni compatible con la vida. Continúa separándote de la vida y haciendo de ti el centro de atención. Te ata a tus propios dilemas y te impide escapar de ellos, porque te lleva a estar absorto contigo mismo. Es una concentración en la mente personal hasta la exclusión de la propia vida, y debido a que la mente personal es inherentemente imperfecta e incompleta, sus imperfecciones y aspectos incompletos te obsesionarán y dominarán tu atención. Para contrarrestar esto existen todo tipo de demostraciones y expresiones de autoimportancia. Esto es evidente en cada aspecto del comportamiento de las personas, en sus conceptos, en sus creencias, en sus filosofías y en su fuerte adherencia a sus propias ideas e ideales. Pero bajo esta miríada de expresiones está la autoimportancia. Y la autoimportancia que esta actitud enfatiza es débil e inconsistente con la vida.»[1]
Referencias
- ↑ Sabiduría de la Comunidad Mayor Volumen 2, Capítulo 32: El orgullo